Confidencial & Editorial
Pesimista a mi pesar
No quiero ser pesimista pero lo que está a la vista no necesita de anteojos, pues aquí solo hay despojos. La economía estancada, la violencia incontrolada, la corrupción galopante y una política infamante; con un panorama tan deprimente ¿cómo puede nuestra gente esperar un buen futuro, si todo se mira oscuro?